Bueno, después de mucho pincharnos con las zarzas del camino entre Villafeliche y Murero, zona denominada como "los estrechos", por fin estas navidades reclutamos voluntarios (Roberto, Santiago y Jose), y nos bajamos cargados de tijeras, horcas y serruchos dispuestos a darle guerra a las zarzas.
Pincharnos lo que es pincharnos ... pues si, nos pinchamos, pero le dimos un buen tute, abrimos el camino, cortamos zarzas y espinos y quitamos piedras.
Después de esta sudada, que se nos hizo de noche, tenemos que probar la senda y desde luego, se pasa de maravilla, hasta que crezca todo de nuevo tenemos un poco de tranquilidad.
El día 31 de diciembre, nos bajamos Roberto y yo. Roberto quería probar el costarron de Villafeliche, así que se sube por la rambla, que por cierto estaba llena de hielo, una lengua que parecía un glaciar, y llegamos al costarron, que es mucho, que esta húmedo, que no estamos preparados, nada le puse unas pocas excusas a Roberto pero no sirvieron, así que p'arriba, hasta los pinares de Murero, con inclinaciones que se levanta la bici, bajamos por los pinares de Murero y subimos a Daroca, por la senda y el camino de la vega, también nos toco quitar alguna rama en la senda entre Murero y Manchones, y tuvimos algún percance con los alambres de la vía que no se ven, así que al loro, si se meten en la bici nos pueden jorobar algo y hacernos caer seguro.
No hice fotos así que pongo alguna de otro dia.