Salimos como estaba previsto de la plaza de Santiago de Daroca, sobre las 10.15 por esperar a alguien que al final se nos unió en el polígono, salimos 17, el mismo numero de la otra vez solo que diferentes ciclistas.
Remontamos las cuesta de Retascon, primera dificultad donde siempre alguien se queda rezagado, pero tambien siempre esperamos arriba para reagrupar, así que rumbo a Langa.
Langa esta en la calle, los vecinos toman en la calle el poco fresco que hace, aunque en la bici no se va mal damos una vuelta por el pueblo y ponemos ruta hacia Murero.
Algunos se adelantan y se desvían de la ruta, son seis, los llamamos les hacemos señas, les silbamos, nada no hay manera se van, se pierden en la noche oscura, ya volverán, cuando se les acabe el camino o se den cuenta de que van solos.
Al fin alguien se entera del telef. es Alberto, ha pinchado, asi que ya se han percatado de que van mal de dirección esperamos casi media hora a que vengan.
esperando a los perdidos.
Cruzamos la carretera de Calatayud y de nuevo parado por pinchazo esta vez dos, los arreglamos y seguimos a dos metros toma, otro que pincha,
La ruta ya no puede ser la misma que queríamos hacer por los pinares de Murero, decidimos bajar por la carretera.
Atacamos al pincho, vaya noche llevamos.
En Murero son fiestas, los vecinos están en la calle. tomamos un refresco en el bar y descansamos un poco, nos hacemos unas fotos., y seguimos.
En la plaza de Murero.
Manchones, tambien están de fiesta, tambien están en la calle todos así que departimos con ellos mientras tomamos otro refresco y nos hacen otra foto.
En la plaza de Manchones.
Desde Manchones nos vamos a ala carretera de Atea para regresar mas tranquilos, la de Manchones tiene mucho trafico con tantas fiestas.
A las 2 o asi llegamos a Daroca, total unas 4 horas y casi 40 km, de las cuales mas de una, hemos estado pinchados y esperando a los perdidos.
Pero el buen rollo ha sido la tónica general, no importa el estado físico de unos y otros, todos salimos y llegamos a la vez, y si hay que esperar a alguien pues se le espera.
En Daroca tomamos otro refresco, hacemos mas fotos y algunos se despiden, el verano acaba, pero seguiremos dando pedaladas por nuestros caminos con nuestros pinchos y nuestros amigos despistados.
un saludo.
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